
Sufrió un parocardiorrespiratorio con muerte súbita, según confirmo el equipo médico presidencial. Había ingresado esta mañana en hospital José Formenti de la ciudad de "El Calafate" acompañado por su esposa, la presidenta Cristina Fernández, pero no pudieron reanimarlo.
Néstor Kirchner era un jugador de básquet frustrado, pero sobre todo un fanático de Racing. El ex presidente nunca ocultó su pasión por la Academia y siempre se mantuvo al tanto de los problemas del club. Incluso llegó a tener una polémica bandera con su nombre en manos de la barra, en momentos en que se hablaba de una posible reelección para el período 2007-2011.